Tips para novias
Daniel Chang: fotógrafo internacional profesional desde 1998, ha fotografiado cientos de bodas en Guatemala y Antigua Guatemala, así como “Destination Weddings” en Bora Bora, INDIA, Playa del Carmen, Roatán y Costa del Sol.
¿Por qué contratar a un fotógrafo profesional para mi boda?
“Este artículo tiene como principal motivo que las parejas potenciales que buscan un fotógrafo para su boda, se den cuenta que una decisión basada únicamente en el precio puede no ser la mas barata a largo plazo.”
Cuando platicamos con los novios sobre las fotos de su boda, se nota la emoción e ilusión que tienen con la fotografía, quieren documentarlo todo, pero algunas veces cuando se habla del presupuesto que tienen asignado para fotografía y video, es mucho menor al costo real de los servicios profesionales. Y está bien, es bueno que busquemos la mejor opción y cuidemos de nuestros bolsillos.
Estamos la era de la fotografía digital y cuando estoy fotografiando alguna boda, siempre encuentro invitados tomando fotografías con sus celulares, cámaras point and shot, iPads e incluso alguna cámara similar a la mía. Así que es lógico pensar ¿Por qué no ahorrar algo de dinero contratando al “amigo/familiar con cámara”, que tiene una cámara parecida a la de los fotógrafos profesionales? Además, ¡los profesionales cobran mucho más!
¡Las fotos de la boda son una inversión!
Algunas veces pueden llegar a ser verdaderas obras de arte. Un álbum de bodas puede llegar ser una reliquia familiar. ¿Cuántas familias muestran con orgullo la fotografía de bodas que da origen de toda su dinastía familiar?
Mi experiencia y dedicación me han enseñado a estar en los mejores “lugares de observación” en los momentos adecuados para capturarlos desde el mejor ángulo posible y a saber cuál es el setting de la cámara que funciona mejor para ese momento único.
El “amigo/familiar con cámara” es más probable que simplemente dispare su cámara en automático a diestra y siniestra y si bien va, con el flash fijo para iluminar; por que “¿mas de alguna tendrá que salir bien, cierto?”
Cuando fotografío una boda, mi meta específica es dejar a la pareja imágenes que pueden atesorar, que se sientan orgullosas de mostrar a todo el mundo y que les llevará de nuevo a recordar ese día especial por muchos años y generaciones.
Los Profesionales invertimos mucho dinero y tiempo en educación, en equipo que va mucho mas allá de ser similar a la cámara del “amigo/familiar con cámara”, quienes únicamente usan el lente del kit que trae la cámara, y este puede funcionar bien, pero hay una diferencia abismal en la calidad de las imágenes cuando se compara a un lente de $100 contra uno de $2000. Sí, no es un error tipográfico, los lentes que usamos los profesionales son mucho mas complejos y por lo tanto ofrecen una óptica mucho mejor; esto no es nada barato, pero la forma en que reacciona con la luz no se puede comparar con el lente del kit y por lo tanto un buen fotógrafo profesional contará no con un lente, sino con varios que tienen diferentes finalidades que andan alrededor de los $800 a los $2000 cada uno.
También debemos tomar en cuenta que un mejor equipo, no se traduce a un mejor fotógrafo. Se puede tener el equipo mas novedoso, caro y no saber para que funcionan todos esos “botones y funciones raras” que traen las cámaras profesionales.
Lo anterior se parece a la Música o Cocina: “El que tengamos una cocina de lo más completa, equipada con lo mejor, no significa que nos convierta en Chef Profesional” o bien, “El que compremos una guitarra, no nos hace músicos”
La educación de un verdadero Fotógrafo Profesional no termina nunca, lleva años aprender a compensar los diferentes tipos de luz en diferentes ambientes, a sacarle el mayor provecho a las funciones de la cámara, a utilizarlas a propósito para lograr un efecto en específico, a manejar las nuevas técnicas que aparecen a diario, a mantenerse al día en todas las tendencias que marcan la moda e incluso a reconocer las que son buenas de las mediocres… Todo con el fin de obtener una verdadera obra de arte.
Esta educación y la experiencia de años es la que nos enseña también que debemos estar preparados para cualquier clase de contingencia, es por eso que un Profesional, no lleva solo una cámara a cada boda, si no dos! con todo y sus lentes, baterías, flashes y otros accesorios. Algunos llevamos hasta kit de costura, ganchos, pañuelos, etc.
En mis años de fotógrafo profesional (desde 1998) he aprendido a arreglar algunos mechones de pelo que se sueltan, a hacer bouquets improvisados minutos antes de la ceremonia, a arreglar colas de vestidos y hasta a secar alguna que otra lágrima; todo con tal de lograr que las fotografías sean las que mis clientes esperan de mi.
Este artículo tiene como principal motivo que las parejas potenciales que buscan un fotógrafo para su boda, se den cuenta que una decisión basada únicamente en el precio puede no ser la mas barata a largo plazo.
Se debe tomar en cuenta el portafolio del fotógrafo también, su estilo, si se desean fotos formales, divertidas, hermosos retratos de novios que utilicen la luz natural y al mismo tiempo reflejen su personalidad; o si quieren arriesgarse a no obtener todas las tomas importantes del día, a tener fotos rígidas y aburridas que no transmiten ninguna emoción del día?
Entre mis clientes tengo la dicha de contar con algunas parejas que no me tomaron en cuenta como primera opción, pero me llena de orgullo que recurrieran después a mi para rehacer su sesión artística y así puedan “reparar” los errores de fotógrafos mas baratos y con menos experiencia que de una u otra forma les quedaron mal.
Cada pareja con la que me reúno es un cliente potencial y un requisito importante para trabajar con ellas es que hagamos “click” desde esa primera reunión; ya que si ellos deciden contratar mis servicios y si yo decido trabajar con ellos; lo mas probable es que me dedique a planear los detalles de la fotografía de su boda unas 2 a 4 horas antes de la boda, que pasemos entre 5 a 12 horas fotografiando el día de la boda y que dedique entre 8 a 10 horas a editar, mejorar color/contraste y a asegurarme que el producto final que les entregue sea una obra de arte y para ello debemos hacer un buen equipo.
Por lo tanto es esencial que las parejas que se quedan conmigo puedan diferenciar que aunque el “amigo/familiar con cámara” toma fotos con una cámara similar a la mía, mis fotografías van a destacarse mucho mas que las que el amigo/familiar logre hacer porque yo tengo el conocimiento, la experiencia, ojo fotográfico y la habilidad, cualidades que no vienen incluídas al comprar una cámara.
Así que en la búsqueda de un fotógrafo, si se trata de elegir basándose exclusivamente en precio, tomen en cuenta que, como regla general se obtiene lo que se paga; si claro, pueden encontrar algunos grandes fotógrafos que cobren barato, pero eso es una excepción más que la regla.
Tomemos en cuenta que después de pasar tanto tiempo organizando la boda de sus sueños, dedicando incontables horas para que cada detalle sea perfecto, luego llega el día tan esperado; al día siguiente de la boda, las flores y toda la decoración estarán en el bote de basura, la música, comida y bebidas se habrán terminado y al regresar de la luna de miel lo único que les quedarán son las Fotografías!
¿No sería lo máximo que fueran unas fotos dignas de recordarles lo que es uno de los mejores días de sus vidas?
Daniel Chang, Fotógrafo Profesional Bodas Guatemala
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