Hoy será un día que definitivamente nunca olvidará, hoy lo sorprendí con su primera clase de manejo. Fue sorpresa porque se lo ofrecí hasta que cumpliera 14, pero debido a que últimamente ha estado muy interesado en los carros y pregunta a cada momento para que sirve esto y aquello; decidí adelantamos un año.
Además, es un buen pretexto en estas vacaciones para apagar por un rato el teléfono, desconectarme de la compu y poder disfrutar de un rato padre/hijo.
Cuando le entregué las llaves y le dije lo que ibamos a hacer, no lo podía creer! Su expresión es algo que nunca olvidaré…
Al pobre se la puse un poco más complicada pero valdrá la pena; su primera clase fue y las siguientes serán con un viejo Vocho ’66… es un carro con muchas “mañas”, con un timón realmente duro (en ese entonces no habían hidráulicos) y además algo incómodo… pero si aprende a manejar bien en un carro como ese, los otros serán “pan comido”…
Gracias por visitar mi blog.
Daniel Chang
Vocho, VW 1966, Beetle 1966